Cuando hablamos de estudios post-universitarios y especialización profesional, a veces empleamos como sinónimos términos que realmente no lo son. Esto acaba generando cierta confusión y hace que te resulte un poco más difícil tomar buenas decisiones para tu futuro.
Es lo que ocurre, por ejemplo, con el máster y el MBA. ¿Son lo mismo o existen diferencias entre ellos?
¿Qué es un MBA?
Estas siglas se refieren al término anglosajón Master of Business Administration o, lo que es lo mismo, Máster en Dirección y Administración de Empresas. Se trata de una una formación superior de posgrado enfocada a personas con titulación y profesionales que quieren especializarse en el ámbito de la dirección y la gestión de empresas.
Si realizas un MBA, conseguirás desarrollar competencias y habilidades directivas orientadas a la toma de decisiones y al desarrollo profesional en diversas áreas de actividad relacionadas con las organizaciones empresariales.
Existen dos grandes tipos de MBA:
- Los generales: proporcionan una visión integral de todas las materias que forman el universo empresarial.
- Los específicos o de especialización: se centran en ámbitos concretos, como, por ejemplo, la dirección y la gestión sanitaria.
Esta formación se dirige, exclusivamente, a personas con titulación universitaria y, en especial, a profesionales que precisan amplían sus conocimientos y competencias con una formación tan cualificada como específica.
¿Qué es un Máster?
Cuando nos referimos a un máster, aludimos a un tipo de enseñanza superior que solo puede cursarse cuando se está en posesión de un título universitario. Sin embargo, en algunos centros de formación, si se trata de un Máster Profesional, aceptan a personas con experiencia profesional acreditada.
Por lo general, su duración oscila entre uno y dos años y se considera como la fase final del segundo ciclo en la formación de los alumnos. Por otro lado, combinan la enseñanza teórica con la práctica y permiten ahondar en áreas concretas de conocimiento.
Se utilizan, en su mayoría, para ampliar conocimientos y especializarse en disciplinas determinadas. Es el caso, por ejemplo, de:
- La logística
- El marketing general o digital
- El comercio internacional
- La prevención de riesgos laborales
- La financiación empresarial
Dicho de otra manera, son formaciones complementarias a las titulaciones universitarias gracias a las cuales podrás especializarte o adquirir conocimientos avanzados en áreas concretas de tu futura actividad profesional.
¿Cómo elegir si estudiar un Máster o un MBA?
Una vez que conoces las diferencias entre los másters y los MBA, lo tienes muchísimo más fácil para decidir qué formación adicional te conviene cursar.
Básicamente, debes considerar que un MBA te ofrece una enseñanza más global, enfocada, principalmente, hacia el liderazgo y las funciones directivas en los distintos departamentos de una organización.
Por su parte, los masters se concretan en una preparación para especializarte en materias determinadas del día a día directivo o empresarial.
En consecuencia, no es correcto plantear este dilema en términos de qué es mejor: la cuestión es qué alternativa es la más adecuada para ti aquí y ahora. Por este motivo, has de dedicar el tiempo suficiente a conocer el plan de estudios y los objetivos de cada opción antes de posicionarte en una dirección u otra. Analiza también tu situación, tus responsabilidades y tus planes de futuro y tómalos como punto de referencia para decidirte.
Algunas pautas para decidirte
Existen algunas consideraciones prácticas que te permitirán verlo mucho más claro a la hora de escoger tu próxima formación post-universitaria. Te presentamos algunas de las más relevantes a continuación:
- Cuando tu objetivo es acumular una mayor cualificación y especializarte en una materia en concreto: elige un máster que responda a tus expectativas y te permita avanzar en esa dirección.
- Si lo que buscas es incrementar tus opciones de ser contratado, enriquecer tu currículo para diferenciarlo y hacerlo más atractivo o postularte para desempeñar actividades departamentales: el máster es la opción más adecuada.
Decide bien cuál vas a cursar porque aportará un sesgo significativo a tu marca personal. - Si pretendes optimizar tu cualificación y preparación para gestionar y dirigir un proyecto empresarial determinado con el propósito de conseguir mejorarlo cuanto antes: los MBA son tu alternativa.
- Cuando tus propósitos son potenciar el networking y contactar con otros líderes de empresa, directivos y profesionales de la gestión empresarial: los MBA te permiten acercarte a este perfil de personas y, por lo general, establecer vínculos colaborativos entre algunos de sus participantes.
En todo caso, apostar por la formación continua siempre es sinónimo de éxito. Mejorará tus competencias, tu cualificación en general y tu idoneidad para asumir puestos de mayor responsabilidad y exigencia.
Dado que el entorno cambia, optar por la formación aporta un valor diferencial fundamental que influye decisivamente en la mejora de tu carrera profesional y en tus probabilidades de recaer en una empresa sólida.
¡No lo dudes y apúntate a un Máster o un MBA de máximo prestigio!
