Aportaciones a la criminología y la criminalística del FBI

El FBI (Federal Bureau of Investigation) ha hecho varias aportaciones importantes a la criminología y la criminalística. Una de las más importantes es la creación del Departamento de Investigación Criminal (Criminal Investigation Division) en 1908, que se ha convertido en la principal entidad investigadora del delito federal en los Estados Unidos. Asimismo, en 1932, creó el Laboratorio del FBI.

Sistema Integrado Automatizado de Identificación de Huellas Dactilares (IAFIS)

Otra aportación importante del FBI ha sido el desarrollo de técnicas y herramientas de investigación criminal. Por ejemplo, el FBI ha desarrollado y perfeccionado el uso de las huellas dactilares como prueba criminalística. El FBI es conocido por su sistema de huellas dactilares, el Sistema Integrado Automatizado de Identificación de Huellas Dactilares, más conocido como IAFIS, es un sistema nacional de antecedentes penales y huellas dactilares mantenido por la División de Servicios de Información de Justicia Penal del FBI (CJIS).

El IAFIS proporciona capacidades de búsqueda automatizada de huellas dactilares, búsqueda latente capacidades, almacenamiento de imágenes electrónicas e intercambio electrónico de huellas dactilares y respuestas, las 24 horas al día, los 365 días del año. La presentación electrónica de huellas dactilares permite a las agencias recibir respuestas a huellas decadactilares criminales en menos de dos horas.

El FBI fue también pionero al introducir, en 1978, la tecnología láser para recabar huellas latentes.

El laboratorio del FBI también ha desarrollado técnicas para analizar pruebas científicas, como el ADN y las huellas de neumáticos. Estas técnicas han ayudado a resolver muchos casos criminales a lo largo de los años, y son ampliamente utilizadas por los investigadores de delitos a nivel local, estatal y federal.

Además, El FBI ha desarrollado un sistema para la clasificación y registro de balas y casquillos llamado el sistema de balística comparativa de armas de fuego, conocido como el National Integrated Ballistic Information Network (NIBIN). Esta herramienta permite comparar las características únicas de los casquillos y las balas recogidas en la escena de un crimen con las de las armas registradas.

Aportaciones a la inteligencia criminal

El FBI también ha hecho aportaciones significativas en el campo de la inteligencia criminal, desarrollando el sistema de información criminal Violent Criminal Apprehension Program (ViCAP), que ayuda a los investigadores a detectar patrones y conectar crímenes y sospechosos.

La serie Mindhunter rescató un episodio histórico: la creación de la Unidad de Análisis de Conducta (BAU, por sus siglas en inglés) y el desarrollo de técnicas de perfilamiento criminal. Los perfiles criminales son retratos psicológicos de los perpetradores de delitos, que se basan en los detalles del delito y en cualquier otra información disponible sobre el perpetrador. Los perfiles criminales pueden incluir información sobre la edad, el género, la educación, la ocupación y los intereses del perpetrador, así como sobre su estilo de vida y su personalidad. Los perfiles criminales se utilizan para ayudar a los investigadores a identificar a los sospechosos y a eliminar a los falsos sospechosos.

La BAU también ha desarrollado técnicas para analizar y clasificar los patrones criminales. Esto ha ayudado a los investigadores a entender mejor cómo los perpetradores de delitos seleccionan a sus víctimas y a planificar sus delitos. Esta información también se utiliza para identificar tendencias y patrones en la criminalidad, y para desarrollar estrategias para prevenir y combatir el delito.

Aportaciones del FBI para la investigación de ciberdelitos

El FBI ha hecho varias aportaciones importantes en el campo de la resolución de cibercrímenes. Una de las principales contribuciones del FBI ha sido la creación de la Cyber Division en 2002, que se dedica específicamente a la investigación de delitos cibernéticos. Esta división trabaja con otras agencias gubernamentales y empresas privadas para identificar, perseguir y detener a los perpetradores de delitos cibernéticos.

El FBI también ha desarrollado una serie de herramientas y técnicas para investigar cibercrímenes. Por ejemplo, el FBI es conocido por su capacidad para rastrear y rastrear la actividad cibernética a través de la red de redes, lo que permite identificar a los perpetradores de delitos cibernéticos. Además, ha desarrollado técnicas para analizar y clasificar los patrones de ciberdelincuencia. Esto ha ayudado a los investigadores a entender mejor cómo los perpetradores de delitos cibernéticos planifican y ejecutan sus delitos, y a desarrollar estrategias para prevenir y combatir el ciberdelito.

Además, el FBI ha trabajado estrechamente con otras agencias gubernamentales y empresas privadas para desarrollar una red de incident response teams (IRTs) que trabajan juntos para detectar, investigar y resolver incidentes de seguridad cibernética.

El FBI también ha creado el InfraGard, un programa de colaboración público-privado para compartir información de seguridad cibernética. El objetivo de InfraGard es ayudar a las empresas a protegerse contra la delincuencia cibernética y brindarles una conexión directa con el FBI y otras agencias gubernamentales para reportar incidentes de seguridad cibernética.

Además, el FBI tiene una serie de unidades especializadas para manejar ciberdelitos como el ciberterrorismo, robo de identidad, fraude y robo de propiedad intelectual, estas unidades trabajan en conjunto para investigar y abatir estos ciberdelitos.

Conclusiones

En conclusión, el FBI ha hecho varias aportaciones importantes a la criminología y la criminalística a lo largo de su historia. Desde la creación del Departamento de Investigación Criminal en 1908 hasta el desarrollo de técnicas y herramientas de investigación criminal como el Sistema Integrado Automatizado de Identificación de Huellas Dactilares (IAFIS) y el sistema de balística comparativa de armas de fuego (NIBIN). El FBI ha sido pionero en el uso de técnicas científicas como el análisis de ADN y huellas de neumáticos y ha desarrollado también herramientas para detectar patrones en los crímenes y conectar sospechosos, como el Violent Criminal Apprehension Program (ViCAP) y la creación de la Unidad de Análisis de Conducta (BAU) donde se desarrolla técnicas de perfilamiento criminal.

Referencias

Bibliografía sobre el FBI

  1. «The FBI: A History» de Ralph W. Martin. Este libro es una crónica detallada de la historia del FBI, desde sus inicios en 1908 hasta el presente. El autor proporciona una visión completa de las operaciones, misiones y objetivos del FBI a lo largo de su historia, así como de los desafíos a los que se ha enfrentado.
  2. «The FBI: The Secret History» de Richard Gid Powers. Este libro examina la historia del FBI desde una perspectiva crítica, abarcando sus operaciones, políticas y prácticas a lo largo de su historia. El autor analiza cómo el FBI ha evolucionado a medida que el paisaje político y cultural de los Estados Unidos ha cambiado y cómo sus métodos y objetivos han evolucionado en respuesta a nuevos desafíos.
  3. «Enemies: A History of the FBI» de Tim Weiner. Este libro es una crónica detallada de la historia del FBI y su papel en la seguridad nacional de Estados Unidos. El autor analiza cómo el FBI ha evolucionado a medida que el paisaje político y cultural de los Estados Unidos ha cambiado y cómo sus métodos y objetivos han evolucionado en respuesta a nuevos desafíos.
  4. «The FBI: A Centennial History, 1908-2008» edited by John Fox y Alexander V.H. Simpkins. Este libro es una recopilación de ensayos escritos por expertos en el tema y miembros del FBI, que recopila la historia del FBI, desde sus inicios hasta el presente. abarcando temas como las operaciones, la política, la tecnología y las personas que han hecho historia en la agencia.
  5. «Mindhunter: Inside the FBI’s Elite Serial Crime Unit» de John E. Douglas y Mark Olshaker. Este libro es una memoria del agente del FBI John Douglas, quien es considerado como el padre del perfilamiento criminal en la BAU, en la cual comparte historias de algunos de los casos más notables en los que trabajó y cómo ayudó a desarrollar técnicas de perfilamiento criminal.

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